Algún día las lagrimas serán secadas con el mejor de los pañuelos del Amor; algún día las penas del hoy serán las alegrías del mañana; algún día sonreire por las cosas que hoy me hisieron sufrir.
Puede que los recuerdos traigan consigo momentos melancólicos, pero lo más importante es la confesión entre mi alma y mi memoria.
Nunca dejaré de recordar, nunca dejaré de recordarte. Te llevó conmigo en mis días y mis noches; en mis penas y algrias; te llevo conmigo siempre siempre... siempre.